Condecoran legado de Sergio Fernando Alanís Ortega
- Me sorprendió recibir este premio, no me lo esperaba, uno solo trata de dar lo mejor de sí, he recibido muchas muestras de cariño, ha valido la pena todo«, asegura don Sergio Fernando Alanís Ortega.
- «Uno de los grandes retos que tendrá la minería es ser atractiva para los jóvenes, hoy no les atrae irse a un lugar remoto a vivir (donde están los proyectos). tenemos que buscar esquemas diferentes de cómo hacerle atractivos a los jóvenes para poderlos captar y retener, con buenos trabajos», precisa
Zacatecas,(21-06-2024).- La primera vez que Sergio Fernando Alanís Ortega entró a una mina le sorprendió el mundo del subsuelo en el que grandes camiones de carga transportaban cientos de toneladas de mineral en caminos tan iluminados cual moderno boulevard, pero entre rocas maravillosas.
«No me imaginé ése tipo de obras, ver vehículos enormes transitando bajo tierra, ver las condiciones laborales excelentes de temperatura de ventilación de iluminación, ver a la gente felizmente trabajando allí para mí fue impresionante», recuerda este hombre de barba blanca, sonrisa franca y que a su paso por la vida no falta quien le de gracias por el bien recibido de sus manos y su buen corazón.
Esa actitud ante la vida y sus 27 años en Grupo Peñoles, le hizo recibir una condecoración por el legado de servicio generoso que ha dado al País a través de la Industria Minera.
Para él la minería es sinónimo de humanismo, aunque para los detractores de esta industria, el término pueda parecer chocante y hasta ofensivo. Y es que es un fiel creyente de que esta actividad provee de oportunidades a quien parecía condenado al desamparo.
-Tuve la oportunidad de estar en todas las operaciones del grupo Peñoles, pude convivir con la población de todas las comunidades donde tenemos influencia, eso es algo que a mí me encanta, ser testigo del bienestar que se genera en las comunidades fue para mi un privilegio-, relata emocionado tras haber sido reconocido dentro de las actividades de la Reunión Internacional de Minería Zacatecas 2024.
Alanís es ingeniero químico de profesión, antes de toparse con los minerales trabajó en Dupont los primeros 18 años de su vida laboral, después entró a Peñoles, su primer cargo ahí fue como director de Planeación Estratégica Desarrollo de Nuevos Negocios y Tecnología, fue director de Minas cuando Peñoles y Fresnillo estaban unidos, con 12 minas, luego fue Director de metales hasta que su desempeño lo convirtió en Director General de Industrias Peñoles, cargo que mantuvo por 12 años.
Don Sergio elaboró el Código de Conducta de los Trabajadores de la empresa Peñoles.
Es un nato formador de personas de bien para la minería y la comunidad, aseguran quienes lo conocen -tiene amigos en todos lados- de ahí que nunca faltaba a las graduaciones de egresados de la escuela Técnica de Peñoles con sede en Coahuila, enfocada en capacitar a jóvenes hombres y mujeres que viven en las comunidades donde la empresa tiene desarrollos mineros e ingresan para forjarse un nuevo camino como técnicos eléctricos, instrumentistas o técnicos mecánicos.
«El escuchar a una mamá que me dijo en la graduación de su hijo usted le dio una oportunidad de vida a mi hijo que no tenía y estoy gratamente agradecida, fueron palabras que se quedaan en mi corazón y me hacen decir valió la pena», rememora
Para este mentor de generaciones hay dos formas elementales con las que podemos tener calidad de vida, -con lo que crece en el campo- o con lo que logramos extraer nosotros de los metales esas verdades, lamenta, que como industria no han sido transmitidas a la población, a la gente de a pie
Pero él si se repite como un mantra, ya sea en la quietud del silencio o enmedio del bullicio un dicho que le significa su vocación. «De todos los bienes que recibe el ser humano, lo que no crece en la naturaleza hay que extraerlo del subsuelo»
Además de la posibilidad de hacer el bien, don Sergio reconoce que el legado más valioso que le deja la minería, de la que se jubiló apenas hace unos días es la amistad.»Tengo grandes y muchísimos amigos, la amistad no se jubila, es de toda la vida».
Su labor no sólo es reconocida en la minería, el ayuntamiento de Torreón lo designó ciudadano distinguido por su valiosa aportación altruista en beneficio de la comunidad. Y el Club Rotario de Torreón lo nombró como Lagunero Distinguido por su prolífica labor social, educativa y cultural.
Don Sergio Fernando se retira contento, mientras en el mundo del subsuelo saben que la leyenda de su nombre crecerá como uno de los más valiosos defensores de la minería mexicana, otro de sus legados.