Ante tragedia migrante en Nueva York, paisanos se lanzan al rescate.
Por Gerardo Romo/// Ágora Digital.
- En Nueva York un servicio funerario antes de la pandemia de la COVID-19, costaba entre 600 y 800 dólares, ante la sobre demanda, el precio aumentó hasta 10 veces, alcanzando los 8 mil dólares.
- Calculan que han muerto más migrantes poblanos en EU que en Puebla por COVID-19.
Nueva York, EU (19-05-2020).- Por temor a ser expulsados de Estados Unidos, muchos mexicanos en Nueva York con síntomas o enfermos de la COVID-19, prefirieron quedarse en casa y morir ahí, antes que correr el riesgo de ser deportados.
“Aunque tuvieran síntomas, muchos hermanos nuestros indocumentados no se acercaron a un hospital, por temor a la deportación, perdieron la vida en sus casas enfermos de COVID-19”, explica Avelino Meza, Secretario General de Fuerza Migrante. https://mx.ivoox.com/es/narra-avelino-meza-situacion-paisanos-nueva-audios-mp3_rf_51205576_1.html
Este movimiento surgió el pasado 5 de Mayo para auxiliar económicamente a los familiares de personas que murieron a causa de la COVID-19 y pagaron cantidades exorbitantes por los servicios funerarios que llegaron a superar los 8 mil dólares.
También apoyan con servicios de tele medicina a los paisanos indocumentados que no tienen cobertura médica y buscan solidarizarse con quien perdió su empleo y hoy no tienen recurso tampoco para alimentación o pagar rentas de sus departamentos o viviendas.
De acuerdo a la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), 959 mexicanos han muerto en Estados Unidos, en corte al 18 de Mayo, de ellos 641 vivían en Nueva York y Nueva Yersey.
“Calculamos que al menos del total de paisanos que han muerto en Nueva York la mitad, 320 son de Puebla”, comentó Avelino Meza.
El Gobierno de Puebla tiene contabilizadas 315 personas fallecidas por la COVID-19 en la entidad y mil 529 personas contagiadas . Así en Nueva York y New Jersey habrían muerto más poblanos que en su tierra natal por ésa causa al día de hoy.
“Hay personas que han fallecido y no son reportadas por sus familiares al consulado a pedir algún tipo de ayuda, el número será mucho más grande al final, estimamos que sea encima de 800 personas y de ellos, calculamos que un 50 por ciento son poblanos”, explica Meza en entrevista telefónica con Ágora Digital.
Sin embargo, el Gobierno de Puebla reconoce que en Estados Unidos, especialmente Nueva York, han muerto 118 paisanos.
Por ahora tanto la SRE como Fuerza Migrante no tienen registro de que algún mexicano haya quedado en una fosa común o en parques públicos, tras fallecer por la COVID-19.
Incluso, mediante el consulado de México en Nueva York, como el Gobierno de Puebla están realizando trámites para repatriar las cenizas de nuestros paisanos a sus comunidades de origen.
«Siempre existirá el temor para muchos que no vieron el cuerpo de su pariente, que no sean las cenizas del familiar que les entregaron, aunque las reciben con su proceso completo que incluye un certificado de defunción», dice Avelino Meza.
El departamento de salud de Nueva York reporta 191 mil 650 casos confirmados, de ellos 16 mil 59 personas fallecieron, hay 50 mil 618 personas hospitalizadas y 4 mil 828 personas siguen en estudio, como sospechosas de haber fallecido por COVID-19, aunque no han sido confirmadas como tal. https://www1.nyc.gov/site/doh/covid/covid-19-data.page.
En Nueva York, por el alto costo de las rentas, en un departamento suelen vivir hasta 4 familias, por lo que cuando se detectaba a una persona de ellas contagiada con SARS-CoV-2, el enfermo era expulsado de casa a la calle, muchas veces sin sus pertenencias.
Incluso, hubo paisanos que duraron en casa hasta 6 días o más con el cuerpo de un familiar muerto a consecuencia de la COVID-19, sin que los servicios funerarios pudieran llegar por él debido a la sobre demanda.
También se sabe que han llegado a morir hasta tres miembros de una misma familia por el SARS-CoV-2.
Además, el servicio funerario en Nueva York elevó hasta 10 veces su costo, por lo que pasó de 800 hasta 8 mil dólares, para lo cual muchos migrantes gastaron quizá todo lo que tenían en cremar a sus familiares fallecidos por la COVID-19 a los que ya no volvieron a ver más que en la urna con sus cenizas luego de que muriera en el hospital.
Estos casos están siendo documentados por Fuerza Migrante.
La organización ha recibido 80 solicitudes de paisanos que les piden apoyo, de estas, 16, un 20 por ciento tiene que ver con personas que perdieron un familiar a causa de la COVID-19 y pagaron gastos funerarios exorbitantes.
El resto de solicitudes de apoyo es de personas que se quedaron sin empleo y no tienen recursos para alimento y mucho menos para el pago de renta.
“Como Fuerza Migrante, con el millón de dólares que reunamos esperamos poder apoyar a por lo menos 3 mil personas, si pensamos que 30 millones lo han perdido todo, es una ayuda muy pequeña, pero es un inicio.
Esperamos continuar con esta iniciativa de solidaridad hasta que como migrantes y como País salgamos de esta tragedia, ya hemos salido de muchas otras, los migrantes estamos construidos de una madera muy resistente, capaz de adaptarse a infinidad de circunstancias adversas”, explica el oriundo de Guaymas Sonora.
Los primeros recursos reunidos, al momento van unos 40 mil dólares, la organización de Fuerza Migrante espera empezar a entregarlos a partir der la próxima semana.
La organización tienen un comité que revisa cada solicitud de ayuda y definirá a quién se le entregarán los recurso que pueden ser de entre 500 o mil dólares, o más, dependiendo del nivel de afectación de la familia beneficiada.
Aunque el gobierno neoyorkino tiene prohibido que los arrendatarios corran a sus inquilinos de sus casas o departamentos, esto sigue ocurriendo con la población indocumentada.
La necesidad hizo que mexicanos y latinos indocumentada fuera de las más golpeadas por la pandemia, pues mientras los empleados de oficinas o gubernamentales tenían más de un mes ya en Cuarentena a causa de la nueva enfermedad, nuestros paisanos resistieron en los restaurantes, trabajando, hasta que fue obligatorio su cierre.
“Nuestra comunidad fue la última que tuvo oportunidad de aislarse y la que menos posibilidades de ahorro tiene por el alto costo de la vida acá, por tanto no te puedes encerrar y se quedaron trabajando lo más que pudieron, por ello, decenas se contagiaron y murieron”, cuenta Meza.
Y es que la mayoría de los mexicanos indocumentados que viven en Nueva York trabajan en el sector de los servicios y también en el área de la construcción.
El 31 de Marzo, en Nueva York murió una persona cada dos minutos a causa de la COVID-19, se superó la cifra de 700, según la agencia británica de noticias BBC continuó al menos hasta el 8 de abril.
Hoy, en promedio siguen muriendo en Nueva York 120 personas a diario a causa del nuevo coronavirus.
Fuerza Migrante apoyará a quienes no han sido ayudados ni por el gobierno o alguna otra institución.
Muchos no sólo gastaron en servicios funerarios, sino gastos no programados, que debieron asumir ya en el desempleo aunque sus trabajos estaban dentro de la categoría de «esenciales», las empresas registran cierres completos o parciales muy importantes y millones de familias de indocumentados debieron endeudarse para pagar medicamentos y servicios de agua y telefonía, por mencionar algunos.
El próximo mes, Fuerza Migrante presentará un proyecto de emprendimiento formal de la comunidad latina, para palear la pérdida de millones de empleos.
El Gobierno del Presidente Trump calcula que lña pandemia dejó al día de hoy a 30 millones de personas sin trabajo en Estados Unidos, al menos el 30 por ciento del total de afectados es de origen mexicano y latino.
«Con tanta pérdida de empleo esperamos que nazcan nuevos emprendedores y Fuerza Migrante quiere estar ahí para ayudarlos a gestionar su propio negocio, estructurarlo con acompañamiento, capacitación, financiamiento y contacto con proveedores», explica Avelino Meza.
Así en medio de la tragedia, los migrantes no dejan de tener esperanza.
«En las crisis a las tragedias, sacamos lo mejor de nosotros, en la medida que nos recuperemos más rápido acá, se recuperarán nuestras familias en México», asegura.