Futuro 21, unidos por un México democrático, libre, justo, seguro, próspero, incluyente y sustentable
Un grupo amplio de organizaciones y ciudadanos preocupados por la situación y perspectivas observadas en México ha decidido abrir diversos cauces de participación política, reconociendo que no hay democracia eficaz sin partidos políticos sólidos, funcionales y creíbles, hoy indispensables para contener la peligrosa deriva populista del actual régimen en 2021 y reencauzar a nuestro país por una senda de desarrollo, institucionalidad, libertad, prosperidad y sustentabilidad.
En este proceso, hemos encontrado que el Partido de la Revolución Democrática está dispuesto a poner al servicio de la sociedad y de los distintos actores políticos del país, su registro para conformar una fuerza política que lo trascienda, así como a las demás organizaciones por separado.
La fuerza política renovada y superior que resulte de un proceso democrático de estas características y dimensiones, será fruto de la convergencia del PRD con organizaciones sociales y políticas progresistas, socialdemócratas y liberales, así como de su metamorfosis y transformación total como partido político.
En la fuerza política superior que anhelamos caben todas las expresiones ciudadanas que luchan por los derechos humanos, causas económicas, sociales, ambientales, urbanas, rurales, indígenas, energéticas, culturales, educativas, tecnológicas y científicas, así como las diferentes organizaciones civiles y empresariales que trabajan por un México mejor.
Queremos una organización política democrática adecuada a las nuevas generaciones, formada con ciudadanías críticas y libres, abierta a la sociedad civil, descentralizada, flexible y ajena a prácticas corporativas y clientelares.
El llamado que ahora hacemos busca una solución democrática a la ominosa encrucijada regresiva que vivimos en México, donde peligran su desarrollo sostenible, las libertades individuales, políticas y económicas, la funcionalidad de la administración pública, la autonomía de los poderes de la unión, el federalismo republicano, la dignidad de la Nación en su relación con Estados Unidos y la posición e influencia de México en el concierto internacional, los organismos autónomos, la pluralidad política y la libre organización de la sociedad civil.
No hay democracia sin partidos políticos representativos, sin el respeto a la oposición y sin contrapesos de poderes. Ante la restauración autoritaria que enfrenta México, los firmantes:
- Que coincidimos en la necesidad de defender a nuestras instituciones republicanas, el pacto federal, el equilibrio entre poderes, la pluralidad y la democracia ante el embate de un gobierno que quiere instaurar un régimen presidencial centralista, unipersonal y autoritario. Que tenemos un compromiso serio con la iniciativa privada y las libertades económicas, hoy amenazadas.
- Que saludamos el llamado del PRD a sumar voluntades en la defensa de las libertades y conquistas históricas que nos han permitido contar con medios de expresión, libres e independientes, pero que hoy sufren un acoso permanente desde la cúpula del poder público.
- Que queremos un modelo de desarrollo incluyente, justo, productivo, competitivo, sustentado en una educación pública meritocrática y de calidad, en la ciencia y en la innovación tecnológica, con visión de futuro para el siglo XXI y capaz de cumplir
la agenda 2030 para el desarrollo sostenible. Estamos convencidos que con bienes públicos de calidad, la inversión privada nacional y extranjera, un Estado competente y eficaz, la seguridad y el imperio de la ley, la economía prosperará, producirá empleos y salarios dignos y reducirá la pobreza y la desigualdad. - Que denunciamos la visión clientelar, demagógica y populista de la política social del régimen, orientada a la construcción de una gigantesca red de subsidios y cadenas de dependencia paternalista para perpetuarse en el poder, destruir la autonomía individual y a las organizaciones de la sociedad civil, descuidando la seguridad social y desentendiéndose del grave problema de las pensiones, lo que compromete el retiro digno de cientos de miles de trabajadores.
- Que vemos con preocupación la ausencia de la política ambiental, la destrucción de instituciones, estrategias y programas para la transición y sustentabilidad energética y el dudoso cumplimiento de los compromisos internacionales de México ante el cambio
climático. Observamos una profunda regresión en la conservación de la biodiversidad terrestre, marina y en la protección de la salud y ante la contaminación del aire, el agua y la tierra. Expresamos nuestra preocupación por la obsesión irracional del régimen
con mega proyectos fantasiosos y demandamos el cumplimiento del derecho de los pueblos originarios a ser consultados de acuerdo al Convenio 169 de la OIT. - Que consideramos el combate a la corrupción como eje de toda política pública y que su éxito depende del cumplimiento de la ley, la erradicación de la impunidad, la existencia de fiscalías autónomas y el Sistema Nacional Anticorrupción. Expresamos preocupación profunda por las muestras de falta de transparencia, conflicto de intereses y corrupción en el actual régimen.
- Que buscamos construir un país con un Estado laico que respete la diversidad cultural, social y la plena vigencia de los derechos humanos. Un Estado que promueva el desarrollo de la juventud, el acceso a oportunidades productivas para todos, el respeto a la equidad de género en la vida social, económica, política y los derechos plenos al matrimonio igualitario.
- Que vemos con enorme preocupación la sumisión, humillación e hipoteca de la dignidad nacional ante las presiones del gobierno de los Estados Unidos, en ausencia de una política exterior coherente, asertiva y de un vacío total de políticas de Estado en materia de inmigración. Es fundamental que México cumpla el Pacto Mundial sobre Migración que suscribió en Marruecos y en todo momento se respeten los derechos humanos de los migrantes, así como diversificar sus relaciones comerciales con el mundo.
- Queremos un país seguro con policías de clase mundial, competentes e incorruptibles, así como un sistema eficiente y eficaz de procuración de justicia.
- Rechazamos el discurso de polarización, resentimiento y rencor esgrimido desde la Presidencia de la República y llamamos a la unidad, a la tolerancia y a la reconciliación.
Teniendo presentes nuestras causas y ante la apertura al dialogo mostrada por el PRD, tras amplias deliberaciones, anunciamos nuestra disposición de sumar fuerzas para discutir los objetivos y la ruta que pudiera llevarnos a conformar una fuerza política superior que represente a los millones de mexicanos que desean vivir en un país democrático, justo, libre, próspero, incluyente, seguro y sustentable.
Esperamos que se concrete esa indispensable refundación y podamos ofrecer a la sociedad un vehículo fundamental de oposición firme y eficaz que contribuya a conformar una nueva mayoría en la Cámara de Diputados en 2021, junto con otras fuerzas políticas para que el Poder Legislativo vuelva a ser independiente y abrir una transición ordenada a partir del 2024.
Sabemos que todo proceso tiene un margen de incertidumbre respecto al desenlace, pero en cualquier caso mantendremos nuestra convicción de construir una nueva fuerza política de amplio espectro que aglutine a socialdemócratas y liberales comprometidos con la democracia y la justicia. Es por eso que algunos de los firmantes hemos hecho los trámites correspondientes en el INE, sin menoscabo de la vocación unitaria que hoy manifestamos de cara a la nación.
México merece una alternativa unitaria frente al mal gobierno. No cejaremos hasta construirla.