Las juventudes en México son el pilar de la Transformación

Por Verónica Díaz Robles/// Colaboración Especial

Zacatecas,(16-03-2025).-Quisiera comenzar reconociendo el gran enfoque del Lic. Andrés Manuel López Obrador, quien, al encabezar la Presidencia de la República, tuvo la visión de que las y los jóvenes serían un engranaje principal para la transformación.

Como bien lo expuso en su iniciativa, la cual aprobamos en el Senado de la República para elevar a rango constitucional el programa Jóvenes Construyendo el Futuro: “La juventud en nuestro país ha sido un sector de la población que durante los gobiernos neoliberales fue olvidado y marginado”.

Actualmente, de acuerdo con información del INEGI, la población joven asciende a 31 millones de personas, casi el 24% de la población total, es decir, 1 de cada 4 personas en México es joven.

Pese a la importante proporción poblacional que representan, el neoliberalismo adoptó un concepto discriminatorio para quienes en esta etapa no contaban con la oportunidad de estudiar o trabajar, mal llamándolos “ninis”.

Con esta deleznable expresión, lejos de alimentar sus expectativas de crecimiento, se encargaron de estigmatizarlos y desmotivar su desarrollo.

A diferencia del pasado, para la Cuarta Transformación la prioridad ha sido la atención de las causas.

Por ello, una de las acciones del primer gobierno de la transformación fue la creación del programa “Jóvenes Construyendo el Futuro”, un programa que nació con la finalidad de brindar oportunidades de capacitación en el trabajo a personas jóvenes de 18 a 29 años que no estudiaban ni trabajaban.

Como parte de la política de Bienestar, el programa se ha configurado año con año para dotar de herramientas a las personas jóvenes, alejarlas de las conductas antisociales y prever su crecimiento económico para una vida mejor.

De acuerdo con información de “Jóvenes Construyendo el Futuro”, se han beneficiado con este programa más de 3 millones de personas jóvenes, de las cuales el 58% son mujeres y el 42% son hombres.

La Cuarta Transformación sí le apostó a la juventud mexicana.

Como a la oposición le encanta hablar de números, pero no los aceptan cuando se les debaten sus falaces argumentos, me permito recordar que, durante el sexenio del Lic. Andrés Manuel López Obrador, se invirtieron casi 136 mil millones de pesos en la juventud.

Esta cifra es veinte veces más que lo invertido entre los cinco sexenios anteriores, desde Salinas, Zedillo, Fox, Calderón y Peña Nieto.

Es decir, el primer gobierno de la transformación hizo más por las y los jóvenes en seis años que las administraciones neoliberales en treinta años.

¿Qué hicieron los gobiernos neoliberales para el bienestar de la juventud? Prácticamente nada. Por el contrario, algunos de ellos se han referido peyorativamente a las y los jóvenes y despreciado el valor de sus esfuerzos.

Pero hay que decirlo con claridad: por ningún motivo nadie tiene derecho de llamar “ninis” ni tachar de flojos a las y los jóvenes, mucho menos ahora, que han demostrado su valía con el impulso adecuado.

En Morena, estamos convencidas y convencidos de que el programa “Jóvenes Construyendo el Futuro” se trata de un verdadero derecho del pueblo, y el tiempo nos dio la razón.

Porque mientras la oposición se llena la boca de mentiras y discursos frágiles, nosotros desde la Cuarta Transformación hemos convertido los programas sociales en derechos constitucionales, para que nadie se los condicione al pueblo.

Comenzamos con la pensión para el bienestar de las personas adultas mayores, con la personas para personas con discapacidad permanente, las becas para estudiantes, los apoyos para las personas productoras del campo, y hoy sumamos el derecho a capacitarse para el trabajo de la juventud mexicana.

La bondad de un programa como este ha logrado que 7 de cada 10 personas jóvenes encuentren un empleo u ocupación productiva.

Aprovecharon la capacitación para el trabajo y demostraron durante los doce meses del programa que pueden seguir aportando a la actividad económica.

Aunado a ello, hoy todas y todos esos jóvenes tienen la oportunidad de desarrollarse, mejorar sus condiciones de vida, contribuir con su talento y construir la paz en sus colonias y comunidades.

Por tanto, lo reitero firmemente: nadie tiene derecho de tildar a las y los jóvenes de “ninis”. Porque si no estudiaban o no trabajaban, no era precisamente por su gusto o voluntad.

Acciones como esta, sumadas al derecho de acceder a becas escolares, han logrado que el abandono escolar se reduzca considerablemente, pues la deserción pasó del 14.5% al 8.5% en educación media superior, y en las universidades del 8.4% al 5.3%.

Durante décadas, el neoliberalismo formó la idea de que el futuro de la Nación era tarea y monopolio de unos cuantos.

Contrario a ello, la Cuarta Transformación de la vida pública del país le apuesta a que las y los jóvenes son el motor principal para construir el futuro.

Quisiera concluir retomando una premisa invaluable, sostenida por nuestra Presidenta de México, la Dra. Claudia Sheinbaum Pardo quien el pasado domingo 9 de marzo en el Zócalo de la Ciudad de México, acertadamente expresó:

“A las y los jóvenes: cultura, deporte, educación, amor y bienestar.”