Cuarentena con mi hijo
Por Haydeé Santillán /// Ilustración/// Cath Zúñiga
Deseo ser una persona socialmente responsable.Es por ello que decidí comenzar mi aislamiento social hace ya casi cuatro semanas.
Creo que utilizar el sentido común en estos momentos puede hacer la diferencia entre el número de casos positivos de la COVID-19 o los negativos; es por ello que decidí quedarme en casa.
Me quedo en casa, por mi hijo, por mis padres, mis hermanas, mis sobrinos, mis amigos y por todas las personas que no conozco pero que aún así merecen mi apoyo y respeto.
Me siento bendecida porque mi actividad laboral me permite permanecer cuidando de la persona que más amo en el mundo – mi hijo-, no sería congruente de mi parte estar en la calle sin oficio ni benéfico, cuando muchos otros desearían permanecer en casa y no pueden; como los médicos, las enfermeras o todas aquellas personas que trabajan en los hospitales o centros de salud, por ello permanezco en aislamiento social.
Mi cuarentena, ha tenido un poco de todo, días en que quisiera tomar mi coche e ir por un helado, tardes de películas, tardes de hornear pastel, hasta días en que pido mis cinco minutos de tiempo fuera.
También pasó mi cumpleaños en el encierro, fue distinto, no esperaba nada y mi madre me sorprendió con un gansito adornado con unas velas. Fue un momento bello.
Pero sin duda he aprovechado estos días para estar con mi hijo Gabo, hacer escuela en casa y echar a volar la imaginación, -de toda situación hay que tratar de sacar lo positivo- y eso estoy haciendo.
Una de mis pasiones es escribir, dejar que las ideas que están en mi cabeza tomen forma y se apoderen de personajes, algunos reales u otros completamente ficticios.
Actualmente estoy en eso, con lápiz en mano y libreta ocupo cada rincón de mi casa para poder sentarme a escribir cuando una idea surge.
Ahora trabajo en una serie de historias para niños, misma que espero poder presentarla pronto y sea agradable al público más exigente que es el infantil.
Hasta ahora así ha transcurrido mi cuarentena, enseñando a mi hijo sobre la importancia que tiene ser solidario.
Estamos buscando una y mil maneras para permanecer en casa sin aburrimiento, estamos siendo creativos, productivos, pero sobre todo, UNA FAMILIA.