“El reto es reconstruir al sistema de salud hecho añicos: Jorge Alcocer
Por Gerardo Romo/// Ágora Digital.
La corrupción de los gobiernos desde Vicente Fox hasta Enrique Peña Nieto (2004-2018) tiene colapsado al sector con 180 centros de salud y hospitales que por sus condiciones de abandono no podrán ser utilizados y serán destruidos, informó Jorge Alcocer Varela, secretario de Salud del Gobierno Federal.
Y lamentó que las obras abandonadas provocaron saturación en unidades médicas, reubicación de personal médico y de enfermería, mayores gastos en subrogación de servicios y retraso en otorgamiento de consulta a los pacientes
Pese a la corrupción detectada, el funcionario admitió que no han hecho denuncias ante la Secretaría de la Función Pública y tampoco tienen el monto del daño causado al erario.
“Dios inventó los números para poder contar las tonterías del hombre, hasta ahora ha sido complejo tener los números parciales del gasto (generado por las obras no concluidas) por el momento no tenemos las cifras, es un reto”, dijo el secretario de salud.
Falta de financiamiento para concluir la obra, incumplimiento de la empresa, falta certeza jurídica en la propiedad de los terrenos y falta de personal para operar hospitales y centros de salud, son las causas detectadas por la Cuarta Transformación por las que se abandonaron las obras.
“Nos dejaron un sistema de salud en añicos, el abandono sistémico al artículo cuarto de la constitución ha llevado a continuos desgajamientos y los escombros fueron a parar claramente a las espaldas de los enfermos más pobres, defraudando lo que la población necesita”, aseguró Alcocer en conferencia de prensa en Palacio Nacional.
“Hay una relación directamente proporcional entre la adaptación a la corrupción en el sistema de salud que nos heredaron y la falta de atención médica a los más necesitados”, agregó.
Según Alcocer las obras inconclusas y abandonadas que les heredaron fueron 306, pero de ellas, 126 serán rescatadas y puestas a funcionar, mientras otras 112 de nueva creación serán incluidas en el Plan Maestro de Infraestructura.
“En esta nueva etapa el humanismo y la ética serán las reglas a seguir”, aseguró.
Explicó que para poner en operación las 238 obras del Plan Maestro para Infraestructura en salud se requerirán 9 mil 716 millones de pesos y 4 mil millones de pesos más en equipamiento de tal manera que se garantice la operación de calidad con personal calificado que atienda los 365 días del año en tres turnos.
Se espera que concluyendo las obras del plan maestro en infraestructura hospitalaria se beneficie a 21 millones de personas en todo el País.
…Y el ISSSTE lleno de hospitales viejos
Luis Antonio Ramírez Pineda señaló que el ISSSTE tiene 23 hospitales que rebasaron ya su vida útil, pues tienen 50 años o más de antigüedad.
“Desde hace muchos años se dejó de invertir en el ISSSTE y se apostó por la subrogación de servicios”, lamentó.
Explicó que para este año se tiene un presupuesto de 600 millones de pesos que permitirá dar término a 12 obras que están en proceso.
…Repararán hospitales dañadas por sismo
Zoé Robledo, director del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) se comprometió que este año serán reparadas al menos 7 hospitales que se vieron afectados por el sismo del 19 de septiembre de 2017.
“Muchas instalaciones médicas se vieron dañadas por el sismo y han tenido que ser intervenidas, se trata de 7 que están en la Ciudad de México, Morelos y Puebla con niveles de retraso muy elevado que debieron hacerse en 2018”, dijo.
Además reconoció que en los estados la situación es muy grave por la falta de servicios y hospitales que no tienen personal suficiente.
Informó que les heredaron 32 hospitales con atrasos serios de al menos 6 años en sus calendarios de ejecución.
Y se tiene proyectado, dijo Robledo, ejercer un presupuesto de mil 948 millones de pesos para concluir 23 obras de salud del IMSS en el País en beneficio de 2 millones 500 mil habitantes.
Para Jorge Alcocer, secretario de Salud del Gobierno Federal el reto será fortalecer el primer nivel de atención a pacientes y que los médicos recuperen la mística de mirar a los enfermos a los ojos cuando los atiendan.